martes, 6 de septiembre de 2011

Muebles de diseño

Requisitos que deben cumplir los muebles de diseño

Cuando hablamos de muebles seguramente se nos crucen por la cabeza varios aspectos de los mismos, el más tradicional es aquél que se relaciona con su funcionalidad; pero en el caso en particular de los muebles de diseño se plantean más aspectos, nos referimos a las formas, los estilos y los materiales. Los muebles de diseño cuentan con una particularidad más marcada si los comparamos con otros mobiliarios: además de servir, gustan; como su nombre lo indica el diseño es la clave del éxito en esta clase de producto pero al mismo tiempo los materiales que se emplean en su confección poseen una duración que no encontraremos en ninguna otra parte. La ergonomía es otro factor fundamental, no nos olvidemos que somos nosotros quienes conviviremos con el mueble que adquiramos y éste ocupará un espacio en nuestro ambiente, es por esto que antes de comprarlo sugerimos probarlo; debemos sentarnos en las sillas y sillones, observar la altura de las mesas, si las proporciones de los elementos son correctas (peso y altura), etc.
Los detalles constructivos también hacen a los muebles de diseño; decimos que son estos últimos los que brindan la calidad al mobiliario; ¿Los cajones de la cocina se deslizan correctamente?, ¿El placard es lo suficientemente profundo para guardar varios trajes?, ¿Cómo son sus herrajes?, etc. Las terminaciones también aportan datos útiles, si éstas no poseen bordes pulidos, no denotarán calidad; las estructuras de los muebles de diseño deben ser firmes y resistentes, es en este último aspecto en donde la materia prima para su elaboración juega un papel vital. Existen alternativas tales como: melamina, madera, tableros de partículas, acero inoxidable, pladur, etc; más allá de que nosotros seamos los que salgamos a buscar muebles, siempre serán necesario el asesoramiento de un profesional para que nos detalle tanto las dimensiones como las condiciones de uso y vida útil de cada pieza. Lamentablemente son muchas las personas que se adentran a tiendas de muebles con el objetivo de comprar muebles vistosos pero al no conocer la materia lo suficiente, terminan comprando un mobiliario agradable a la vista pero que solo perdura por pocos años; se recomienda adquirir muebles de diseño en aquellos negocios que ofrezcan garantías, es así como nos sentiremos más seguros de que hemos comprado un producto de buena calidad y con muchos años de vida.

¿Víctimas del mal diseño?


Como hemos mencionado en el párrafo anterior, más de un individuo ha adquirido su mobiliario erróneamente; todos los muebles de diseño deben ser necesariamente ergonómicos, de lo contrario estamos hablando de piezas mal hechas. A la hora de elegir es vital analizar si el producto es funcional y seguro, como también evaluar cuánto tiempo se utilizará, las preferencias sociológicas y físicas de quién disfrutará o sufrirá la pieza; lo que queremos decir con esto es que el diseño va mucho más allá de la apariencia y la estética, también provoca emociones y genera un ambiente específico.
Un gran ejemplo es el siguiente: las líneas simples suelen transmitir aburrimiento, otras personas no optan por los muebles de diseño debido a que asumen que si lo utilizan lo pueden dañar; otros los eligen únicamente porque llaman la atención, invitan a la relajación y al descanso. También cabe destacar que no existe el diseño perfecto, cada persona es distinta y se proyecta a su manera, la clave está en no dejar nada al azar, por ende, se incita al comprador a cuestionar sus decisiones, probarlas y evaluarlas. Los muebles de diseño de salones han adoptado la moda de colores saturados y vivos; con respecto a los espacios, las reuniones de amigos deben hacerse en lugares de amplias dimensiones, de lo contrario incomodidad sería un factor casi imposible de revertir; los asientos de las sillas que son demasiado blandos deforman la curva natural de la columna y dificulta la incorporación lo que conlleva a dolores lumbares y de espalda, es por eso que los muebles de diseño deben contar con propiedades cómodas y no únicamente bellas. Cuando elijamos muebles de diseño no debemos fijarnos únicamente en valores estéticos sino también en las necesidades para cada actividad, el mobiliario debe adaptarse a diferentes situaciones, por ejemplo, una silla de trabajo debe ofrecer facilidad para guardarse y poder graduarse en la altura y posición que la gente necesita.